Los manantiales geotérmicos de Budapest son una de sus mayores atracciones turísticas. Sin embargo, pocos de estos turistas saben que las aguas termales de las profundidades de la ciudad han creado algo más increíble. En las montañas calcáreas, las aguas termales formaron un sistema de grutas de más de cien kilómetros de largo.
La gruta más extensa de Budapest es Pál-völgyi-Mátyás-hegyi, sistema de 20,1 kilómetros de largo en el Parque Nacional del Danubio-Ipoly. Es un auténtico laberinto con múltiples niveles y la mayoría de sus cavidades están debajo de los barrios residenciales. Durante la aventura, supervisada por un guía profesional en todo momento, escalarás muros y te deslizarás por pasajes estrechos para recorrer el sistema de cuevas más largo de la ciudad.
¡Déjate maravillar por esta parte desconocida de la capital de Hungría!